Reseña Turística

La ciudad de Ica es como hemos dicho, una costa recia con sabor a desierto, dunas y grandes tablazos, bañados por ese sol inclemente que quema las pampas de salitre.

Ica se despeña en infinidad de playas y peñeríos de extraordinaria belleza.

Ica es una tierra solitaria, en la que reinan los más poderosos vientos de la costa peruana.

Esta región desértica, ejerce un extraño sentimiento en todo aquel que se detiene a contemplar sus cerros de piedra quebrada por el sol, sus atardeceres de ensueños o simplemente, deleitarse con sus pecanas, pallares, naranjas y ciruelas.

Chincha, la cuna del arte negro del Perú, es la puerta de entrada al departamento de Ica donde comienza con sonido de tambores y zapateo.